La prueba del delito... una melodía

En Singapur las cosas no pintan bien para los ladrones de móviles. Así como en nuestro continente existe un debate sobre la manera en que pueden reducirse los robos de teléfonos móviles (sistemas de seguridad del terminal, control por parte de las operadoras, información sobre hábitos de uso, etc), el Singapur han optado por la mano dura (muy exagerada).

Ayer nos llegaba la noticia de que un joven del país ha sido condenado a seis años de trabajos forzados tras sustraerle el móvil a un par de jóvenes en plena calle. En el juicio celebrado para determinar la veracidad de la acusación, el ladrón explicó que se había comprado el móvil por 70 dólares, cuando su precio rondaba los 140.

Pero no era esta la prueba del delito, sino una melodía guardada en el móvil. Al parecer, uno de los jóvenes reconoció una melodía almacenada en el terminal, que, supuestamente, no se encontraría en otros modelos iguales, por lo que se entiende que la habría compuesto el mismo usuario. Este punto dio la razón a los jóvenes y condenó severamente al delincuente.


Fuente: Noticias.com
Día: 12/07/02

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